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Construir la paz en Colombia, proyecto a proyecto

Countries
Colombia
Sources
UN News
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Tras el acuerdo de paz firmado en 2016 entre las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y el gobierno, un grupo de excombatientes se asentó en la zona montañosa del norte del país. Ahora, hacen un repaso a los cinco años de paz y su reintegración en un lugar conocido como Tierra Grata.

En la Serranía del Perijá, en el norte rural montañoso de Colombia, se reúnen alrededor de una olla al fuego un centenar de personas que en otros tiempos estuvieron enfrentados.

Excombatientes del grupo rebelde Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), sus familias y habitantes de la zona, así como soldados del Ejército Nacional de Colombia, conviven ahora al borde de un precipicio. Cargan tuberías de tres pulgadas de diámetro a lo largo de casi nueve kilómetros de terreno escarpado, como parte de la labor que llevan a cabo juntos en un proyecto para mejorar el suministro de agua apoyado por la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO).

Les llevó meses de duro trabajo levantar la canalización, colocarla en su sitio, enterrarla y conectarla a un río local que proporciona un suministro fiable de agua.

"Lo más bonito que recuerdo es la forma en que el Ejército, nuestro antiguo adversario, la comunidad, los antiguos rebeldes y las autoridades locales trabajaron juntos, sin importar el pasado de enfrentamientos", rememora Yarledys Olaya, una mujer indígena barí que pasó 20 años luchando en el grupo rebelde, ahora ya disuelto.

La guerrilla de las FARC libró una guerra civil de medio siglo contra las autoridades colombianas, que llegó oficialmente a su fin con la firma de un histórico Acuerdo Final de Paz en 2016.

Nueva vida en Tierra Grata Yarledys Olaya, una de los cerca de 13.000 excombatientes que se comprometieron con la paz en Colombia, comenzó su nueva vida en la localidad de Tierra Grata.

"Me veo aquí en el futuro; me imagino envejeciendo en este lugar", dice. "Este proceso no ha sido fácil. En el pasado vimos cómo mataban a nuestros compañeros. Sin embargo, personalmente el proceso me ha permitido tener una familia, poder pasar tiempo con ellos y abrir mi casa a mis hijas. Por eso queremos seguir construyendo y apostando por la paz. No solo por los rebeldes que se han reintegrado a la sociedad, sino por una paz colectiva para todo el país".

En el cercano pueblo de San José de Oriente, los habitantes temían que cuando los excombatientes llegaran a la región, habría un resurgimiento de la violencia, pero cambiaron de opinión cuando vieron que solo traían la paz y la voluntad de trabajar en proyectos comunitarios.

Yarledys llegó a Tierra Grata en noviembre de 2016 a bordo de un camión, junto a otros 120 guerrilleros, la mayoría de ellos armados. Vestía un uniforme de camuflaje, botas, una camiseta negra y llevaba una mochila y un fusil al hombro. Se cubría el rostro con una pañuelo verde para no ser identificada.

"Había mucha desconfianza. Éramos reservados, hoscos, y los lugareños nos miraban de otra manera". Hacía dos meses que se había firmado el Acuerdo de Paz entre el gobierno y las FARC.

"No fue una elección personal, fue una decisión colectiva", recuerda. "Pensé, vamos a seguir, pero lo haremos viviendo la vida de otra manera. La parte positiva es que ya no tenía que ver caer a mis compañeros, lo que suele ocurrir a menudo con las guerras".

Seguimiento del alto el fuego

En un lugar aislado, donde se alzaba un viejo caserío tras una densa vegetación de planta nativa de frailejones y otras especies, se despejó un terreno para construir un campamento de reinserción. A su alrededor había personal del Ejército y de la policía colombiana.

En una zona cercana, las Naciones Unidas levantaron unas carpas donde los expertos que habían supervisado el alto al fuego verificarían la dejación de armas. Entre marzo y septiembre de 2017, la Misión de la ONU en Colombia recibió 8994 armas de las FARC en todo el país, incluida Tierra Grata.

Se invirtieron seis meses en la construcción del campamento con un total de 158 alojamientos. La idea inicial era que los excombatientes pasaran el proceso de reinserción en el campamento, para después encontrar un lugar más permanente. Sin embargo, como la mayoría no tenía a dónde ir, se quedó en estas tierras.

Una hija de la guerra, una hija de la paz

En la actualidad, Tierra Grata es formalmente un pueblo en el que viven unas 300 personas, tanto excombatientes como familiares. Algunos nacieron allí y otros simplemente se unieron a sus familias.

Yarledys Olaya dejó a su recién nacida, Yacana, con un familiar cuando se unió a las FARC y se reencontró con ella en Tierra Grata, dos meses después de su llegada. Dos años más tarde dio a luz a su otra hija, Yaquelín, uno de los 65 bebés que nacieron en el nuevo asentamiento.

"Yacana es mi hija de la guerra y Yaquelín, mi hija de la paz", dice.

Yarledys sigue trabajando en proyectos comunitarios, construyendo estructuras permanentes y llevando agua y electricidad al pueblo. "Como mujeres durante la guerra, jugamos un papel fundamental", sostiene, "y ahora, en este nuevo momento, ayudamos a construir la paz, porque sentimos que este proceso es nuestro; por eso estamos dispuestas a contribuir con nuestra última gota de sudor a este futuro".

Paz, justicia e instituciones sólidas

  • El Objetivo de Desarrollo Sostenible 16 (Paz, justicia e instituciones sólidas) reconoce que los conflictos, la inseguridad, la debilidad de las instituciones y el acceso limitado a la justicia siguen siendo una verdadera amenaza para el desarrollo sostenible

  • Pretende reducir todas las formas de violencia y las muertes causadas por esa violencia

  • Promueve el estado de derecho a nivel nacional e internacional y garantiza la igualdad de acceso a la justicia para todos

  • La Misión de Verificación de la ONU en Colombia fue establecida por el Consejo de Seguridad en 2017 para respaldar el proceso de paz en el país

  • La Misión ha trabajado estrechamente con las autoridades nacionales y los excombatientes para promover el progreso en la reintegración y las cuestiones relacionadas con la seguridad