Skip to main content

Emergencia en Haití tras el terremoto

Countries
Haiti
Sources
Acción contra el Hambre
Publication date
Origin
View original
  • 10 días después del terremoto de magnitud 7,2 que ha diezmado la región suroccidental, los puentes y las principales carreteras están destruidas, lo que está dificultando el acceso a las comunidades más afectadas y el reparto de la ayuda humanitaria. Más de 4 millones de haitianos dependen de este apoyo para satisfacer sus necesidades básicas.
  • El impacto en la salud mental de la población es latente, por lo que los equipos de Acción contra el Hambre en el terreno están dando apoyo psicológico a las víctimas y al personal sanitario que está respondiendo a la emergencia.
  • Gran parte del sistema de riego de los campos de arroz de la zona (una de las principales áreas de producción de alimentos) se ha visto dañado, lo que implica grandes pérdidas de las cosechas, poniendo en peligro el abastecimiento de este producto y, por ende, un empeoramiento de la seguridad alimentaria de la población.
  • Acción contra el Hambre está respondiendo al gran terremoto y tormenta en Haití, abordando la necesidad urgente de alimentos, agua y saneamiento. La combinación mortal de desastres ha causado la muerte de más de 2.200 personas y 12.000 heridos y afectado a aproximadamente 2 millones de personas, casi la mitad de las cuales son niños y niñas.

“Hemos visto una desolación total, casi todas las casas destruidas, las carreteras destrozadas, las montañas cayendo en el camino y obstaculizando el paso. El acceso a la ayuda humanitaria es clave, necesitamos continuar con nuestra respuesta para evitar que la situación empeore”. Es lo primero que comenta Roseval Supreme, director de Acción contra el Hambre en Haití, tras su regreso del sur del país, donde nuestros equipos se han desplazado para hacer un análisis de necesidades tras el desastre que ha dejado a miles de personas en una situación extrema de vulnerabilidad. Asegurar un camino viable y facilitar el acceso a las zonas afectadas es uno de los grandes retos ahora mismo, ya solo existe una carretera que conecta Puerto Príncipe, la capital, con la región del sur.

EL IMPACTO DE LA EMERGENCIA A MEDIO PLAZO

El terremoto y la tormenta Grace han golpeado de nuevo a la población haitiana, agravando la pobreza subyacente, la debilidad de las infraestructuras y el trauma residual del terremoto de 2010. La región afectada es una de las principales zonas de producción de alimentos del país y, en particular, la segunda zona más importante de producción de arroz, el alimento básico de la dieta en Haiti.

Gran parte del sistema de riego de los campos de arroz de la zona (una de las principales áreas de producción de alimentos) se ha visto dañado, explica Roseval. "Es un reto que debemos tener en cuenta para la recuperación a medio y largo plazo, y un problema que se tiene que solucionar cuanto antes para no impedir las próximas cosechas de arroz" añade el director país de Acción contra el Hambre.

EL ACCESO A AGUA SEGURA, ESENCIAL EN EMERGENCIAS

Tras el desastre, las infraestructuras de agua se han visto completamente destruidas. “Nuestra prioridad ha sido apoyar a las entidades locales desde el primer momento, especialmente a la DINEPA, la dirección nacional de suministro de agua, para garantizar el acceso a agua potable”, explica Noelia Monge, responsable del equipo de emergencias en Acción contra el Hambre.

“En términos de agua y saneamiento la situación sigue siendo crítica. Por ello, Acción contra el Hambre mandó desde España módulos de potabilización de agua, asegurando el acceso para miles de personas, ya que cada módulo puede proveer a unas 4 000 personas de agua al día. Además, estamos desplegando a personal experto desde España para que puedan facilitar el buen funcionamiento y uso de estas plantas”, añade la coordinadora del equipo de emergencias.

Junto a los problemas derivados de la falta de acceso a agua segura, desde Acción contra el Hambre se está contemplando el impacto del terremoto en términos nutricionales, para lo que “vamos a organizar comedores comunitarios para niños y niñas menores de 5 años, así como la distribución de galletas BP5, especialmente pensadas para casos de desnutrición” explica el equipo de Acción contra el Hambre de Haití.

EL APOYO PSICOSOCIAL, PRIORITARIO PARA UNA POBLACIÓN EN SHOCK

“La población está en estado de shock. La gente intentaba rescatar a personas de los escombros sabiendo que quedaban pocas esperanzas de encontrar a supervivientes. Veíamos a las personas en las esquinas de las carreteras, sin nada, buscando sus pertenencias entre las ruinas”, relata Supreme desde Haití.

Nuestros equipos están atendiendo a las víctimas del seísmo y sus familiares, ofreciendo apoyo psicosocial a quienes llegan al hospital. Pero también al personal institucional que opera en la zona, ya que son las mismas personas que atienden a las víctimas. Además, estamos organizando formaciones para el personal de enfermería, para que puedan identificar casos de estrés postraumático y acompañar a estas personas en el proceso del duelo.

Ante esta situación el apoyo de la comunidad internacional es imprescindible, ya que "los 2 millones de personas que viven en la región han sufrido el impacto de una u otra forma. Tenemos que entender la magnitud del evento, donde más de 2 000 personas han fallecido, miles han resultado heridas y, sin grandes recursos ni infraestructuras, la solidaridad internacional es más necesaria que nunca”, concluye Roseval.

Acción contra el Hambre lleva 35 años trabajando en Haití, siendo una de las primeras organizaciones humanitarias en responder al terremoto de 2010. Desde entonces, ha implementado programas de nutrición, agua y saneamiento, liderando la lucha para erradicar el cólera en Haití.