Saltar al contenido principal

El Salvador: Análisis de inseguridad alimentaria aguda de la CIF noviembre 2020 – agosto 2021, publicado en diciembre 2020

Países
El Salvador
Fuentes
IPC
Fecha de publicación
Origen
Ver original

1.04 MILLONES DE PERSONAS ESTARÁN EN CRISIS O EMERGENCIA DE INSEGURIDAD ALIMENTARIA AGUDA EN EL PERÍODO DE HAMBRE ESTACIONAL DE JUNIO A AGOSTO 2021

Resumen

De noviembre 2020 a febrero de 2021, 684,000 personas (10% de la población analizada) se encuentran en Crisis alimentaria o peor (Fase 3 o peor de la CIF) y por tanto requieren acciones urgentes. De estas personas, 589,000 se encuentran en Crisis (Fase 3 de la CIF) y 95,000 en Emergencia (Fase 4 de la CIF). El departamento más afectado es Ahuachapán clasificado en Fase 3, el resto de departamentos del país han sido clasificados en Estrés (Fase 2 de la CIF). La población más afectada es aquella que depende de actividades agrícolas y ganaderas debido a pérdidas de ingresos por las restricciones de movilidad y transporte derivadas de la pandemia de COVID-19, así mismo, el sector informal y en especial los pequeños comerciantes que se ven obligados a utilizar estrategias de afrontamiento de crisis o emergencia para solventar sus brechas alimentarias, como la venta de sus activos productivos. Los efectos económicos de la crisis sanitaria de COVID-19 han sido contrarrestados por la ayuda humanitaria estatal y cooperación externa en los meses entre abril y junio 2020, evitando una mayor severidad de inseguridad alimentaria aguda en este período.

Para el período de marzo a mayo 2021, la población en condición de Crisis o peor (Fase 3 de la CIF o peor) se incrementará a 985,000 y, en el período entre junio y agosto 2021, 1.04 millones de personas se encontrarán en esta misma condición. En ambos períodos, los departamentos de Ahuachapán, La Unión y San Miguel están clasificados en Fase 3 de la CIF mientras el resto de departamentos se clasifican en condición de Estrés (Fase 2 de la CIF).

Factores clave asociados

COVID-19

Las restricciones a la movilidad y límites en los aforos decretados por el gobierno para controlar la expansión de la pandemia han limitado el acceso a mercados, lugares de trabajo, y servicios básicos. Actualmente las medidas de confinamiento han sido liberadas facilitando la movilidad de las personas; sin embargo, el transporte para acceder a mercados, lugares de trabajo y servicios básicos siguen limitados. La economía local aún no se recupera. Los pasos fronterizos continúan con limitaciones para la movilización de trabajadores y comerciantes de la región.

Efectos climáticos

Las tormentas tropicales Amanda y Cristóbal y los Huracanes ETA e IOTA causaron pérdidas de granos básicos, principalmente frijol, hortalizas y café. También se redujo la oferta de trabajo agrícola jornalero. Los efectos han sido inmediatos en la generación de ingresos por venta de cosecha, y la disponibilidad y acceso a los alimentos.

Pérdida de ingresos

Alrededor del 57% de los hogares han visto reducidas sus fuentes de ingresos, ya sea por estar relacionadas con el comercio informal, por cierres de fuentes de empleo, o por reducción de la oferta de trabajo agrícola jornalero. La reducción del ingreso limita el acceso a servicios básicos y alimentos e incrementa el uso de estrategias de afrontamiento que afectan a los medios de vida en los hogares.