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¡Alto a la guerra contra la niñez!

Pays
Colombie
Sources
Save the Children
Date de publication
Origine
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PAREMOS LA GUERRA EN CONTRA DE LA NIÑEZ

12 de febrero: Día de la Mano Roja

• Desde hace 16 años se reconoce el Día de la Mano Roja, una conmemoración nacional e internacional en contra el reclutamiento y la utilización de niños, niñas y adolescentes por parte de los grupos armados ilegales.

• Entre 1985 y el 01 de enero de 2019, 7.398 niños, niñas y adolescentes han sido víctimas de reclutamiento, según la Unidad para la Atención y Reparación Integral a las Víctimas

• “El reclutamiento es el peor de los delitos, vulnera todos los derechos de las niñas y de los niños que son víctimas. Y la mejor manera de prevenir que esto le ocurra a los niños y a las niñas es garantizando la totalidad de sus derechos; un niño que tenga educación, que tenga un entorno seguro, que tenga un entorno familiar amable, va a pensarlo dos veces antes de caer en las redes de los que quieren utilizarlo o de los que quieren reclutarlo”, ratificó María Paula Martínez.

Bogotá, 12 de febrero. El reclutamiento, uso y utilización de los niños, niñas y adolescentes en acciones relacionadas con el conflicto armado, son situaciones en las que todos sus derechos se ven vulnerados, y por esta razón, toda persona menor de 18 años que haya estado en alguna de estas condiciones se reconoce como víctima, tanto para la legislación colombiana como bajo la mirada del Derecho Internacional Humanitario.

Sin embargo, en el Día de la Mano Roja, donde se conmemora el aniversario de la firma del protocolo de la Convención sobre los Derechos del Niño de 1989 que se refiere al uso de menores de edad en los conflictos armados y que Colombia aprobó por medio de la Ley 833, con la cual se comprometió a adoptar medidas para evitar que los niños y las niñas participen en el conflicto armado, se encuentra que desde 1985 y hasta el 01 de enero de 2019, 7.398 niños, niñas y adolescentes han sido víctimas de reclutamiento, según la Unidad para la Atención y Reparación Integral a las Víctimas.

Y aunque no es factible precisar el número de niños y niñas reclutados, ya que aún hay un sub-registro de esta problemática por causas como: estar en zonas apartadas, temor a denunciar y desconocimiento sobre los procesos de reintegración, si es necesario tomar acciones inmediatas. “Desde Save the Children trabajamos diariamente para que ningún niño, niña o adolescente sea víctima de reclutamiento, uso o utilización en el marco del conflicto armado. Para ello, enfocamos nuestros esfuerzos en promover una educación de calidad y una protección integral en cada uno de los lugares en los que hacemos presencia”, resalta María Pula Martínez, directora de Save the Children Colombia.

Pero hoy, más allá de hacer un recuento de niños, niñas y adolescentes, y de sus vulneraciones, se quiere llamar la atención sobre los entornos de protección de la niñez que deben ser fortalecidos, precisamente para evitar que este grupo de la población vea la violencia como una opción de vida, y uno de estos es el fortalecimiento de los espacios educativos.

Escuelas seguras, una herramienta para evitar el reclutamiento

La educación como uno de los Derechos Humanos fundamentales articula de manera esencial la vida de las personas, así como el crecimiento y el desarrollo sostenible de los países. De esta manera, es responsabilidad del Estado, la familia y la sociedad garantizar integralmente que los niños y las niñas accedan, permanezcan y se formen en un sistema educativo incluyente y de calidad. “La educación es un derecho que debe ser garantizado en su totalidad, lo que implica también la protección física y emocional de los estudiantes, los docentes y de la comunidad en general” resaltó María Paula Martínez.

Además, el panorama de vulneraciones previas al reclutamiento, que se encuentra en el último informe del ICBF sobre niños, niñas y adolescentes desvinculados, expone que el índice más alto de escolaridad era de quinto de primaria, que recoge al 21% de los registrados, el 13% asegura haber cursado hasta tercero de primaria, y tan solo el 0.03% terminó el bachillerato. Teniendo en cuenta que el promedio de edad del reclutamiento se estima en los 12 años, es evidente que, además de contextos familiares adversos y violentos, la escuela tampoco fue un entorno protector y hubo una desescolarización temprana.

Y es que no es posible desconocer que el conflicto armado que vive Colombia desde hace medio siglo ha tocado también a instituciones educativas, estudiantes y docentes, así como a las comunidades en general. Según el estudio Caracterización de los niños, niñas y adolescentes desvinculados de grupos armados al margen de la ley y bandas criminales entre 2007 y 2013 en Colombia, el 56% de los niños y niñas que fueron víctimas de reclutamiento estaban cursando un grado de primaria.

De allí parte la importancia de que el gobierno colombiano se comprometa con la educación y firme la Declaración de Escuelas Seguras, con la que se compromete a dar un apoyo político amplio a la protección y a la continuidad de la educación como derecho, en contextos de conflicto armado; a la importancia de promover una educación protectora y protegida para todos los niños, niñas, adolescentes y jóvenes; y a la aplicación de las “Directrices para Proteger Escuelas y Universidades del Uso Militar durante el Conflicto Armado”.

“El reclutamiento es el peor de los delitos, vulnera todos los derechos de las niñas y de los niños que son víctimas. Y la mejor manera de prevenir que esto le ocurra a los niños y a las niñas es garantizando la totalidad de sus derechos; un niño que tenga educación, que tenga un entorno seguro, que tenga un entorno familiar amable, va a pensarlo dos veces antes de caer en las redes de los que quieren utilizarlo o de los que quieren reclutarlo”, ratificó María Paula Martínez.

Para mayor información:
Luz Alcira Granada
Directora Nacional de Incidencia Política y Comunicaciones
Save the Children
Móvil. 3115617821