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Desde febrero pasado­ se cobra el copago correspondiente al 10% del valor de las casas que fueron entregadas a los damnificados por el terremoto del 16 de abril del 2016.

Hasta ayer (12 de abril del 2018) ya se recaudó USD 1 millón de ese rubro. Hasta el momento ya se han entregado 31 006 casas, de las que se deben obtener USD 13,9 millones en total.

El Ministerio de Desarrollo Urbano y Vivienda (Miduvi) recuerda que el Acuerdo Ministerial 016-17, que se firmó en febrero del 2017, indica que los beneficiados deben cumplir con un copago cuando se cumpla el segundo año de la recepción de las casas construidas con un incentivo de USD 10 000 y 4 000 para las reparaciones.

Esa condición la conocieron los favorecidos cuando firmaron el acta de recepción de la vivienda;pero hay familias que dicen no tener los fondos suficientes para cancelar esos valores.Ese es el caso de Manuel Hernández, Rosa López, Esther López, Mary Saltos y Santa Valencia, del cantón Jaramijó, provincia de Manabí. Ellos cuentan que las notificaciones con el anuncio de la obligación de pago llegaron en pequeñas hojas volantes.

El documento, sin firma ni sellos de ninguna entidad, apareció en las rendijas de las puertas una mañana de febrero pasado, y los ocupantes reaccionaron extrañados por el aviso que detalla el cálculo de la cuota que deben consignar. Hernández cuenta que sus ingresos diarios están entre los USD 5 y 10, que obtiene como ayudante de una lancha pesquera en el puerto Jaramijó.

Él dice que las faenas son de dos a tres días a la semana, por lo que las ganancias apenas le han alcanzado para la comida del diario, el pago de servicios básicos e imprevistos para su hogar. López, Saltos y Valencia trabajan durante tres a cuatro horas al día en empresas que procesan los productos del mar, en la ciudad de Manta. Cada hora les representa un pago de USD 2.

Por ello, ambos coinciden que por ahora se les hace imposible cumplir con el pago. Esa situación es similar en otras familias manabitas, que piden ser exoneradas de ese compromiso o que les den otras opciones para cumplir.

El Miduvi informa que una de las alternativas para estos casos es una prórroga de cinco meses antes de que se inicie el proceso de reversión del incentivo. Esta opción depende de un informe que elabora la entidad por cada caso.

El Comité de Reconstrucción y Reactivación Productiva asegura que ya se han entregado 31 006 viviendas en las provincias de Manabí y Esmeraldas, las más afectadas por el movimiento telúrico. Además, se están construyendo otras 7 457 y se contratarán 6 992.

La meta es edificar 45 455 casas, de la cuales se espera recaudar USD 20 430 000 por el concepto de copago. La inversión en viviendas asciende a USD 575 millones hasta el 31 de diciembre del 2017, de acuerdo con cifras del Comité. Manuel Hernández, Rosa López, Esther López, Mariy Saltos y Santa Valencia viven en la urbanización Nuevo Jaramijó, junto a otras 116 familias. Ellos reconocen que cuando recibieron las casas tenían un año de gracia para pagarlas y que las cuotas las podían consignar hasta en 36 meses.

Pero en ese entonces, afirman algunos, pensaron que con las promesas desde el sector privado y público de nuevas plazas de trabajo podrían cumplir con ese compromiso y tener ingresos. Quienes viven en casas construidas en terrenos urbanizados por el Estado y reconstruidas en terreno propio tienen tres años para cancelar el valor del copago. Mientras que para quienes hicieron reparaciones, el plazo es de 16 meses. Santa Valencia, dirigente del asentamiento Nuevo Jaramijó, está agradecida porque luego de varios meses salió de la incomodidad de los albergues en el que estuvo con sus vecinos. Pero ahora se siente muy preocupada porque no ha pagado tres meses de la cuota de su vivienda.

En la notificación entregada le detallan que el copago mensual que le corresponde es de USD 31,11 para los que están en reasentamientos y terrenos propios. Mientras que para los que hicieron mejoramientos en sus inmuebles es de USD 28. El Miduvi detalló que el artículo 3 del Acuerdo 016-17 señala que en caso de incumplimiento o retraso por más de seis meses consecutivos se reserva el derecho de reversión del incentivo.